En Bayaguana la pobreza campea sin que Solidaridad resuelva nada

Por cada niño que va a la escuela, familias reciben 150 pesos mensuales (lo reciben cada dos meses y suman 300 pesos per cápita), pero por esos lares en las escuelas les quitan 25 y 50 pesos a cada familia, supuestamente para pagar el gas de una supuesta merienda ¿De qué ayuda estamos hablando? El Gobierno les da 150 y la escuela les quita entre 200 y 100 pesos

Fuente: Acento

SANTO DOMINGO, República Dominicana.-En Bayaguana, municipio de Monte Plata, observar detenidamene la pobreza que sufre su gente eriza la piel, especialmente si se camina monte adentro. Las estadísticas de la provincia, la pobreza extrema y el manejo de los programas sociales del Gobierno conforman una trilogía de difícil comprensión hasta para los egresados de las aulas universitarias, mucho más para la gente del distrito municipal Trinidad.


Según el Censo de 2002, Bayaguana tenía una población de 33,122 almas, lo que no se puede contrastar con los datos actuales, pues la Oficina Nacional de Estadística (ONE) apenas ha publicado la población de la provincia Monte Plata al 2010, que era de 181,423, según el último y cuestionado censo.

Sin embargo, la Junta Central Electoral sí tiene claro cuántos son los electores de Bayaguana, aunque el padrón, actualizado a febrero de este año, no fue dado a conocer por municipio sino por provincia, y Monte Plata aporta 118,195 electores,  y entre mayo de 2010 y febrero de 2012 el número de electores sólo creció 1.82 por ciento, uno de los más bajos.

Monte Plata es una de las provincias con mayores niveles de pobreza en toda la geografía nacional: 73.3 por ciento de sus hogares son pobres, el 23.4 por ciento  se ubica en extrema pobreza y tiene un Índice de Calidad de Vida (ICV) de 46.5, el más bajo de la región Valdesia a la que pertenece, según datos de la Onaplan de 2005.

A mayo de 2010, en Monte Plata habían 24,084 hogares beneficiaros de la tarjeta Solidaridad, y por persona eran unos 76,022, mientras que en Bayaguana la cantidad de hogares intervenidos era de 3,661.

No se explica que si Monte Plata tiene uno de los mayores niveles de pobreza y pobreza extrema, sólo el 64% de sus habitantes que calificaron para recibir el subsidio Comer es Primero (Cep) haya sido beneficiado, según datos del Programa Solidaridad a diciembre de 2010. En ese momento, el 98 por ciento de los habitantes de Monseñor Nouel que calificaron para Cep recibían el subsidio, y esa provincia es una de las menos pobres del país. Así que si usted es pobre, no viva ni en Pedernales ni Monte Playa, vaya a Monseñor Nouel y de seguro tendrá Solidaridad.

A diciembre de 2010, provincias más beneficiadas con Cep que Monte Plata habían más que Monseñor Nouel, citamos a Sánchez Ramírez con 96% de los calificados para Cep recibiendo ese subsidio; La Vega, con 93%, y Duarte con 82%.  La pobreza extrema en Sánchez Ramírez era de 10.5%, la de La Vega, 5.8; y la de la provincia Duarte, 6.8%, nada que ver con el 23.4% de hogares que exhibía Monte Plata para la misma época.

Pero la injusticia no sólo es a nivel de la distribución por provincia, sino también en el manejo del programa. Acento.com.do tomó el caso del distrito municipal de Trinidad en Bayaguana y en un trabajo de campo el resultado fue el siguiente:

1. La población de Trinidad estuvo casi un año sin recibir los subsidios del Programa Solidaridad a pesar de que la mayoría de los beneficiarios dice que cumplía con la corresponsabilidad (mandar a los niños a la escuela, vacunarlos, asistir a consultas médicas, etc.).

1. Luego de restablecidos los subsidios –en enero de este año- hay algunos dislocamientos. Personas que recibían varios subsidios y ahora sólo reciben uno.
   
   
2. Existen muchas personas censadas, a quienes se les ha dicho que califican para recibir uno o varios subsidios y, sin embargo, no han recibido nada.
   
   
3. Existen ciudadanos que si bien son pobres,  son jóvenes y saludables y reciben varios subsidios, mientras hay algunos envejecientes censados y en espera de la erogación de la tarjeta.
   
   
4. Se emiten tarjetas a favor de hombres casados, y cuando estos mueren la familia pierde el subsidio porque no es transferible, y la mujer y los hijos quedan más desamparados.
   
   
5. El Seguro Nacional de Salud (Senasa) no es tan efectivo en algunos casos, los pacientes generalmente no encuentran medicamentos en los centros de salud de la zona.