Fuente: El Nuevo Diario

"Ella está enferma y necesita misericordia", dijo
el pastor dominicano Félix Rodríguez, que dirige la congregación en la
iglesia Bíblica Bautista, situada en la calle Portland, donde Cermeño
pintó con grafiti el número en la puerta principal del templo.
"Estamos rezando por ella", añadió el predicador.
Una compañía de limpieza se ofreció para borrar
gratuitamente el grafiti. El reverendo dijo que la señora Cermeño
necesita ayuda psicológica.
Ella fue instruida de cargos en el Tribunal
Superior del Distrito de Haverhill el miércoles 31 de diciembre, luego
que la policía la detuviera por vandalizar los templos.
El juez Stephen Abany le ordenó pasar 20 días en
un centro de recuperación de Worcester, para determinar si es
mentalmente apta para enfrentar un proceso.
El fiscal adjunto, John De Paulo, dijo que Cermeño
negó ser la responsable de otro reciente acto vandálico en una iglesia,
de la que se robaron la efigie del niño Jesús y la sustituyeron por la
cabeza de un cerdo decapitado, lo que podría ser clasificado como un
crimen de odio por motivos religiosos.
Los investigadores dijeron que no han establecido si ella fue la autora de ese hecho.
La bolsa en la que metieron la cabeza del puerco,
fue recuperada por la policía que analizará las huellas y las comparará
con las de Cermeño.
Pero ella admitió haberse robado un crucifijo que estaba en el mismo pesebre del que se robaron al niño Jesús.
Cermeño, hablando en la corte a través de un intérprete en español, respondía en voz alta las preguntas del magistrado. Se persignó en dos ocasiones.
La psicóloga Weida de Alejandría, quien habló con
Cermeño antes de que la desamparada fuera presentada en el tribunal,
dijo que la acusada tiene dificultad para concentrarse.
Está acusada de agresión con un arma peligrosa,
destrucción malévola de propiedad privada, conducta desordenada,
provocar lesiones a una iglesia y resistencia al arresto.
Los daños se calculan en $5.250 dólares en total.
Además, se le imputa allanamiento de morada.
Cermeño usó un marcador negro para pintar el 666
en la puerta de la iglesia, lo que fue descubierto por el feligrés Brian
Bly, quien notificó a la policía.
Él dijo que trató de llamarle la atención a la
mujer que vio llevándose también un crucifijo. El número, ella lo pintó
en 15 lugares diferentes del exterior de la iglesia.
La policía la encontraron en la calle principal de
Haverhill y cuando se le acercaron, intentó atacar a la detective Dana
Burrill con el crucifijo, acusan los investigadores.
Ella le dijo al detective Carlos Arriaga, que no está loca, aunque la gente cree que lo está.
Dijo que tiene teléfonos celulares en su cabeza y
siente el dolor del Espíritu Santo. El marcador, usado para pintar el
666, fue encontrado entre sus pertenencias.
El alcalde de Haverhill, James Fiorentini, dijo
que Cermeño ha ido varias veces al ayuntamiento, le ofreció enviarla a
un refugio, ella se negó y volvió a verla antes de navidad, dándole $20
dólares.
"Me alegro de que va a conseguir ayuda", señaló el alcalde.
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