Fuente: El Nuevo Diario
SANTO DOMINGO.-Cientos de dominicanos
marcharon este domingo por diferentes calles de Santo Domingo por la
preservación del medio ambiente, tras señalar que el patrimonio natural
de la República Dominicana está amenazado de muerte. Los dirigentes
ambientalistas, en amplio recorrido por diferentes sectores de la zona
baja del Distrito Nacional, que partió del Parque Independencia, dijeron
que nunca comoahora los riesgos y amenazas han sido tan inminentes,
variados y ominosos.
“Una especie de voracidad, movida por el afán de
lucro de unos pocos, asume las características de cruzada depredadora y
contaminadora de ríos, bosques, playas, costas, lagunas y montañas”,
reza un párrafo del manifiesto por la vida preparado porlas
organizaciones ambientalistas presentes en la caminata.
Expresan, asimismo, que las provincias Monseñor
Nouel, Sánchez Ramírez, San Juan, Santiago Rodríguez, San Cristóbal y
Monte Plata están ahora bajo el mayor riesgo que puede causarla
megaminería a cielo abierto y el uso de cianuro, colocando en
extremopeligro las dos principales unidades hidrológicas del país: la
Cordillera Central y Los Haitises.
Significan, además, que detrás de las nunca
cumplidas promesas de progreso de la industria minera-luego de la estela
de daños causados en Pedernales, Cotuí, Bonao, San Cristóbal y otras
zonas, presentados como credenciales funestos de lo que le espera al
país en esas seis provincias productoras de agua y alimentos- la
República Dominicana se expone a la mayor amenaza que jamás haya
enfrentado.
Precisan los quejosos, que en verdad, la geografía
que abarcan esas provincias en alto riesgo ha sido prácticamente
entregada a las compañías mineras Globestar, Barrick Gold, Golquest,
Unigold, Golcorp, Newmont y Everton, para la exploración de oro en su
metodología más agresiva, contaminante, destructiva y ambientalmente
irrecuperable.
Expusieron , asimismo,que dos cosas están bien
claras en el actual negocio de la minería en República Dominicana,
primero, que los beneficios no se quedan en el país, y, segundo,que los
daños ambientales no serán remediados por las empresas mineras.
En el documento entregado a la prensa, los
quejosos, consideran que lucharán incansablemente por la preservación de
la sanidad ambiental, defenderán el patrimonio natural, la soberanía
nacional y popular.
Significan, finalmente, que este es el compromiso
que asumen sin vacilación, y que para lograr esos propósitos, tienen la
firme voluntad de movilizarnos en forma ascendente hasta rescatar la
esperanza, salvar la patria y construir una vida sana y digna.
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