Fuente: Washington, EFE
Liderazgo. La presidenta argentina Cristina Fernández (en foto de archivo) fue dada de alta el sábado. 
“El estudio histopatológico definitivo constató la presencia de nódulos en ambos lóbulos de la glándula tiroides de la presidenta, pero descartó la presencia de células cancerígenas modificando el diagnóstico inicial de la punción”, dijo el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, al leer el informe médico.
El 28 de diciembre se hizo público que Kirchner, de 58 años, había sido diagnosticada con cáncer de tiroides el 22 de diciembre tras una punción, días después de haber asumido por un segundo período hasta 2015.
La mandataria recibió el alta médica y abandonó el hospital el sábado. Según el parte médico “la histología definitiva fue informada como adenomas foliculares y de acuerdo a este favorable diagnóstico el equipo a cargo considera que el tratamiento quirúrgico realizado es suficiente, no siendo necesario la administración de yodo radiactivo”.
En estos casos el cambio de diagnóstico “es algo que suele ocurrir”, aseguró el cirujano de cuello Ernesto Ibarra Puente al canal de televisión Todo Noticias.
Según el médico “este tipo de operaciones puede tener errores”, pero defendió la decisión de intervenir ante la eventualidad de que se confirmara el diagnóstico de cáncer.
“El diagnóstico inicial debe haber dado una célula papilar y el cirujano, un prestigioso especialista decidió la intervención. Pensemos qué difícil sería la situación de haberle sacado un lóbulo (de la tiroides) y que pasara al revés, que fuera un cáncer y tener que reoperar y sacar la glándula por completo”, dijo.
Alicia Gauna, ex presidenta de la Sociedad Argentina de Endocrinología y Metabolismo, coincidió en que “al confirmarse que se trató de adenomas foliculares, la enfermedad quedó resuelta con la cirugía”.
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