Por el crimen de Olivo no hay detenidos, mientras la Policía acelera las pesquisas
Blas Olivo Santana. Foto/Archivo. |
Olivo salió el domingo de una misa en Bonao, donde se reunió con toda su familia, y salió para Santo Domingo, pero nunca llegó.
Los primeros informes dan cuenta de que la yipeta de Olivo, una Land Crusier, fue encontrada con un choque en la parte delantera, próximo a la comunidad Palero, en Bonao.
Ayer, el general Jorge Mancebo Bautista dijo “que apenas estamos cotejando las evidencias encontradas en la escena del crimen, pero garantizamos que pronto daremos una respuesta a la sociedad”.
La Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), en un comunicado emitido ayer, instó a las autoridades a apresar y someter a la Justicia a el o los responsables de matar al periodista Olivo.
El cadáver de Blas Olivo, quien laboró por alrededor de dos décadas con la referida institución, fue encontrado con heridas en diversas partes del cuerpo en la comunidad Arroyo Vuelta, próximo a Piedra Blanco, Bonao, informó la Policía.
“Solicitamos que se realicen todas las actuaciones de investigación posibles para dar con el paradero de quienes le han quitado la vida a un ser humano extraordinario”, manifestó Osmar Benítez, presidente de la JAD.
El médico legista que levantó el cadáver del periodista Blas Olivo confirmó que el comunicador fue asesinado de cuatro balazos, dos en el tórax y dos en el abdomen.
Se informó que el periodista estaba ayer en una actividad familiar en Bonao, a propósito de que su madre cumplía cinco años de muerta, pero que tuvo que ir a Santo Domingo a cumplir con un compromiso, con la promesa de retornar a buscar a sus familiares, y no regresó.
Olivo era un reconocido comunicador, que gozaba del aprecio de todos sus colegas. La Policía trata de establecer quiénes lo mataron, así cómo los motivos del crimen.
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