La entidad del orden identificó a las víctimas
como Lizbeth Lugo Espinal, de 23 años; Andreína Espinal Guzmán, de 25, y
Antonia María Espinal Díaz, de 43; mientras que el homicida es Tomás
Rafael Sosa Rodríguez, quien está detenido en el destacamento policial
de Moca.
Para cometer el hecho, de acuerdo a la
institución, el victimario utilizó una pistola calibre nueve milímetros,
la cual se encuentra en poder de la uniformada.
Aunque la Policía no especificó el móvil del
hecho, familiares de las víctimas dijeron que se trata de un caso de
violencia machista.
Según las versiones de la familia, el hombre
habría ingerido bebidas alcohólicas en varios establecimientos de Moca y
habría pregonado que algo grande ocurriría.
Pedro Andrés Espinal, padre de Andreina Espinal,
compañera sentimental de Sosa Rodríguez, dijo que el agresor la
maltrataba y que este jueves llamó alarmada a sus familiares, pero que
cuando acudieron a la casa a cerciorarse de lo que ocurría, se
encontraron con la tragedia.
La seguridad del área donde se encuentra recluido
Sosa Rodríguez en el cuartel de Moca, fue reforzada, debido a la ira que
ha provocado en la población el triple asesinato.
No obstante, los familiares de las víctimas
revelan que solo quieren que el responsable del triple asesinato sea
drásticamente sancionado por la Justicia, como establece la ley.
Edwin Espinal, hermano de Andreina, manifestó que
otra hermana siempre aconsejaba a su pariente que rompiera la relación
amorosa que tenía con Sosa Rodríguez porque "era muy violento", pero que
no hacía caso.
Las primeras informaciones dan cuenta de que el
homicida había si deportado de Estados Unidos, un hecho que no han
confirmado los vecinos de la fallecida, que sí explicaron que residió en
ese país por más de 20 años y que luego regresó a República Dominicana,
donde operaba un lavadero de vehículos en Moca.
Con estas tres muertes se eleva a 17 las personas
asesinadas en Moca y localidades vecinas en un mes, lo que ha desatado
la preocupación entre sus pobladores y las autoridades de la zona.
Fuente: El Nuevo Diario
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