Olivo de León, presidente CDP. |
“La muerte de Blas es un crimen de Estado. Por eso
nuestro llamado al presidente Danilo Medina a que ordene una
investigación más acabada para que salga a flote la verdad y sean
interrogadas personas que aún no han sido requerido por la autoridad”,
indicó.
De León explicó a la periodista Greysis de la Cruz
en su programa "El Verificador", difundido a través del canal 24 en
cable y 69 UHF, que el Colegio de Periodistas no cree en ninguna de las
versiones que se han difundido hasta el momento sobre el asesinato.
“Todo lo que se ha difundido de la muerte de Blas
Olivo no obedece a la verdad, se dijo que lo mataron para robarle, y no
le robaron”, manifestó.
El gremialista reveló que el malogrado
periodista era vigilado desde dos vehículos. “Él estaba siendo vigilado
desde hace días, incluso el día de su asesinato habían dos vehículos
cerca de la casa donde se realizaba unos rezos a su madre”, aseguró.
Descartó que el recluso José Miguel Rodríguez
(Job), muerto a tiros por la Policía Nacional, tuviera relación con
el asesinato de Olivo. Señaló que el móvil del crimen del periodista se
debió a que manejaba información confidencial.
“Tampoco tiene que ver la muerte de Job, la muerte
de Blas está ligada a informaciones que manejaba y que personas que aún
no han sido identificadas entendían que Blas era una amenaza y lo
quitaron del medio”, manifestó el presidente del CDP.
Fuente: El Nuevo Diario
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